Resumen:
El artículo describe maneras en las que una comunidad puede reaccionar ante situaciones de desastre, tanto locales como nacionales. Sobre la base de experiencias vividas en Israel en los últimos viente años, incluyendo sucesos traumáticos recientes como el asesinato del Primer Ministro Yitzhak Rabin y las bombas terroristas suicidas, y una intervención en Buenos Aires, Argentina, después del atentado perpetrado en julio de 1994, se propone un modelo que describe etapas distintas de reacción. Se señala como relevante la creación y concreción de programas de prevención e intervención. Se enfatiza el rol de la escuela y del psicólogo escolar para la realización de esos programas y sus roles críticos para afrontar las crisis en lo inmediato y en momentos posteriores. El programa preventivo se centra en el esfuerzo de posibilidades internas de niños y docentes (innoculación) y brinda elementos para garantizar el apoyo emocional de los profesionales a cargo de la situación de crisis. Finalmente, se propone un modelo para el desarrollo futuro de la especialización en psicología escolar desde una perspectiva comunitaria.