Construcción preliminar de una escala multidimensional para evaluar síntomas clínicos de ansiedad. Evidencias de validez de contenido y aparente

Iliana Díaz Kuaik1 y Guadalupe de la Iglesia2

Artículo

Material original autorizado para la publicación en la revista Psicodebate. Facultad de Ciencias Sociales. Universidad de Palermo.

Recibido 05–03–2017 | Aceptado 10–05–2017

Resumen

La medición de la ansiedad debería contemplar la multidimensionalidad de este constructo. Los instrumentos de uso local presentan limitaciones relacionadas con su abordaje incompleto, el contenido de sus ítems, la capacidad para discriminar los síntomas ansiosos de los depresivos y la desactualización con respecto a los diagnósticos vigentes. Un instrumento que tome en cuenta la conceptualización multidimensional de ansiedad y los criterios diagnósticos para el trastorno de ansiedad según la última versión del Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5; American Psychiatric Association, 2013) podría responder a las limitaciones de sus predecesores. La construcción de la Escala Multidimensional de Ansiedad (EMA) pretende dar respuesta a esta vacante y constituirse como un instrumento con buenas propiedades psicométricas destinado a la evaluación multidimensional de la sintomatología ansiosa en población adulta. El presente artículo describe el procedimiento llevado a cabo en la primera etapa de la construcción de la escala: redacción de los ítems, juicio experto y prueba piloto. Se modificó la redacción de la consigna, así como también el formato de respuesta y la redacción de algunos
reactivos. El índice de acuerdo entre jueces indicó que 18 ítems contaban con poco acuerdo interjueces acerca de la pertenencia a la dimensión evaluada.

Palabras Clave: ansiedad, evaluación, multidimensional, validez, juicio experto, prueba piloto.

Preliminar construction of a multidimensional scale to assess clinical symptoms of anxiety. Evidences of content and face validity

Abstract

The measurement of anxiety should contemplate its multidimensionality. The instruments of local use present limitations related to incomplete approach to the dimensions of the construct, the content of its items, the capacity to discriminate the anxious symptoms of the depressives and the outdatedness with respect to the most current diagnoses. An instrument that takes into account the multidimensional conceptualization of anxiety and diagnostic criteria for anxiety disorder according to the latest version of the Diagnostic and Treatment Manual (DSM-5, American Psychiatric Association, 2013) may respond to the limitations of its predecessors. The construction of the Multidimensional Anxiety Scale (EMA) aims to respond to this vacancy and constitute an instrument with good psychometric properties intended for the multidimensional evaluation of anxious symptomatology in the adult population. The present article describes the procedure carried out in the first stage of scale construction: item design, expert judgement and pilot study. The wording of the slogan was modified, as well as the format of response and the writing of some reagents. The index of agreement among judges indicated that 18 items had little inter-agreement about membership in the assessed dimension.

Keywords: anxiety, evaluation, multidimensional, validity, expert judgment, pilot test.

La ansiedad es un constructo complejo y multidimensional que agrupa a un conjunto de manifestaciones psíquicas o cognitivas, conductuales, somáticas y afectivas (Clark & Beck, 2012; González, 1993; Sierra, Ortega, & Zubeidat, 2003). De acuerdo al modelo de Clark y Beck (2012), la dimensión fisiológica agrupa las respuestas fisiológicas automáticas generadas por la activación de los sistemas nerviosos simpático (SNS) y parasimpático (SNP) ante la presencia de una amenaza o de un peligro. Se las considera respuestas defensivas porque preparan al organismo para defenderse ante contextos que provocan miedo. La dimensión conductual refleja las respuestas conductuales llevadas a cabo para prevenir, controlar, luchar o huir del peligro. La dimensión cognitiva, incluye aquellos pensamientos y creencias relacionadas con la amenaza y vulnerabilidad personal, a partir de las cuales se valora el peligro, la ocurrencia de este, y los propios recursos de afrontamiento. Finalmente, la dimensión afectiva deriva de la activación conjunta de la dimensión cognitiva y fisiológica, y refiere la experiencia subjetiva de la sensación ansiosa. Está compuesta por afectos negativos, displacenteros de tensión y aprehensión, que revelan el malestar subjetivo vivenciado por el sujeto.

Si bien la ansiedad es una emoción psicobiológica básica que se activa ante un desafío o peligro cumpliendo una función esencialmente adaptativa, también puede presentarse de forma extrema. Como respuesta adaptativa, esta ligada al instinto de autoconservación de las especies, permitiendo la defensa ante el peligro y el desarrollo de soluciones para emerger del mismo (Ansorena, Cobo, & Romero, 1983; Cía, 2007; Clark & Beck, 2012; González, 1993; Sierra et al., 2003). Sin embargo, como respuesta patológica, resulta inadecuada en intensidad al estímulo que la gatilló, es recurrente, coartativa y desorganizadora del pensar y actuar (González, 1993). La ansiedad como respuesta patológica a un estímulo perturba y deteriora progresivamente a la persona, afectando sus relaciones familiares y sociales, así como la posibilidad real de desarrollo profesional, entre otros (Czernik, Almirón, Cuenca, & Mazzaro, 2005; Puchol Esparza, 2003).

Su descripción fenomenológica se encuentra incluida en los manuales internacionales de diagnóstico y tratamiento como el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, en su cuarta y quinta edición, el DSM-IV-TR y el DSM-5 (American Psychiatric Association, 1994, 2013) y la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud, décima edición, la CIE-10 (Organización Mundial de la Salud, 1993). Los síntomas ansiosos se agrupan en la categoría de trastornos de ansiedad y abarcan una serie de cuadros clínicos que comparten, como rasgo común, la presencia de ansiedad extrema de carácter patológico, que se manifiesta en múltiples disfunciones y desajustes a nivel cognitivo, conductual y psicofisiológico (Clark & Beck, 2012).

En el terreno de la psicopatología, la sintomatología ansiosa se constituye como una de las problemáticas centrales de la salud pública. Los datos internacionales muestran un aumento sostenido de la presencia de trastornos de ansiedad en la población, ubicándose actualmente entre los más prevalentes (Bandelow, & Michaelis, 2015; Baxter, Scott, Vos, & Whiteford, 2013; Organización Mundial de la Salud & Banco Mundial, 2016). En América Latina y el Caribe, los síntomas ansiosos junto con los depresivos son los más frecuentes (Rodríguez, Kohn, & Aguilar Gaxiola, 2009). En Estados Unidos resultan ser uno de los principales trastornos que afecta la población adulta (American Psychiatric Association, 2013; Barlow & Durand, 2013; World Health Organization, 2017). En Argentina, cerca del 15% de la población general que realiza una consulta externa experimentan alguna forma de ansiedad (Via Alvarado, 2011), cifra coincidente con las publicaciones internacionales (García Campayo, Caballero, Perez, & López, 2012; Navarro, Acevedo, Sánchez, & Delgado, 2016).

Operacionalizaciones de la sintomatología ansiosa

Si bien la investigación clínica de la ansiedad ha dado lugar al desarrollo de innumerables tratamientos, dicho avance no se produjo en paralelo con la creación de métodos precisos y válidos para su diagnóstico clínico (Echeburúa, 1996). En la actualidad existe un amplio número de técnicas e instrumentos para la evaluación de la ansiedad procedentes de diversos enfoques teóricos. La mayor parte de las teorías y modelos de las emociones aceptan la existencia de tres sistemas de respuesta emocional (fisiológico, cognitivo y motor) que se postulan como relativamente independientes entre sí (Lang, 1968, 1971). Si bien se reconoce la necesidad de una evaluación multidimensional de la ansiedad, a la hora de abordar el fenómeno aún son escasas las investigaciones clínicas que la incluyen (Cano Vindel & Miguel Tobal, 1990).

Localmente, para la medición de la ansiedad se cuenta con la adaptación y normas de diversas escalas pertenecientes a inventarios de personalidad, inventarios de síntomas y escalas específicas para evaluar ansiedad.

Con respecto a los primeros, el Cuestionario Multifacético de Personalidad de Minnesota (MMPI-2; Butcher, Graham, Tellegen, & Kaemmer, 1989; Casullo, 1999) incluye dos escalas para valorar sintomatología ansiosa: la escala ansiedad de Butcher (Anx; Butcher et al., 1989) y la escala de Ansiedad de Welsh (A; Welsh, 1956). Ambas valoran principalmente síntomas cognitivos y afectivos asociados a la ansiedad generalizada. Por otro lado, el Inventario Revisado de Personalidad Neo (NEO PI-R; Costa & McCrae, 1992; Richaud, Lemos & Oro, 2001), incluye una escala que valora síntomas cognitivos de ansiedad asociados principalmente al trastorno de ansiedad generalizada. Las escalas de dichos inventarios resultan insuficientes para evaluar aquellos trastornos con predominancia de síntomas fisiológicos y/o conductuales como el trastorno de pánico, agorafobia y fobias

Con respecto a los inventarios de síntomas, el Inventario Revisado de 90 Síntomas (SCL-90-R; Casullo, 2004; Derogatis, 2002) posee una escala de síntomas ansiosos en la que se incluyen síntomas generales de ansiedad pertenecientes tanto al dominio fisiológico como cognitivo. Sin embargo, la muestra de síntomas fisiológicos se presenta acotada, dejando fuera síntomas patognomónicos como por ejemplo hiperventilación, sudoración, sofocos o escalofríos, tensión muscular, parestesias, sensación de mareo o inestabilidad. Tal es así que el SCL-90-R resulta insuficiente para evaluar aquellos trastornos con predominancia de síntomas fisiológicos, como el trastorno de pánico o la agorafobia; y el dominio conductual, propios de las fobias, la agorafobia o del pánico.

Asimismo, las escalas de ansiedad de los inventarios antes mencionados no pueden utilizarse de forma independiente, su uso requiere la aplicación del inventario completo, lo cual demanda mucho tiempo y entrenamiento especializado del evaluador. Además, su objetivo no es evaluar ni discriminar dimensionalmente los síntomas de ansiedad. Todo ello limita considerablemente su uso si el objetivo es obtener una medición acabada del constructo.

Por otra parte, existen escalas específicas de ansiedad. El Inventario de Situaciones y Respuestas de Ansiedad (ISRA; Miguel Tobal & Cano Vindel, 1986, 2002) evalúa la ansiedad a través de las respuestas emocionales perteneciente a tres sistemas -cognitivo, fisiológico y motor-, y cuatro áreas situacionales -de evaluación, interpersonales, con estímulos de carácter fóbico, y de la vida cotidiana-. Si bien posee un buen muestreo de respuestas fisiológicas, cognitivas y motoras de ansiedad, el instrumento es extenso y complejo de responder. Para responder a él se requiere de cierto nivel o grado de discriminación de situaciones y síntomas que resulta inadecuado para el uso con determinados individuos, tales como pacientes psiquiátricos o sujetos con bajo nivel educativo (Martínez Sánchez et al., 1995). Para su aplicación se requiere que el evaluado haya alcanzado un nivel educativo secundario y que el estado emocional y cognitivo del sujeto le permita discriminar situacionalmente sus diversas respuestas de ansiedad. Es por ello que, si bien esta técnica cuenta con numerosos estudios de validez y adaptaciones (Amorim Gaudêncio, 1997; Amorim, Cano Vindel, & Miguel Tobal, 1996; Collado, 2010; García Batista, & Cano Vindel, 2014; Martínez Algeciras, & Rodríguez Jiménez, 2015; Sanz, 1991), su utilización en la investigación y en la práctica clínica es limitada (Martínez Sánchez, et al., 1995).

Por otra parte, el Inventario de Ansiedad Estado Rasgo (STAI; Leivobich de Figueroa, 1991; Spielberger, Gorsuch & Lushene, 1983) evalúa la ansiedad en dos dimensiones relativamente independientes: como estado y como rasgo. Ambas valoran síntomas generales de ansiedad, con predominancia de síntomas cognitivos y afectivos, resultando insuficiente para valorar aquellos trastornos de ansiedad con predominancia de síntomas fisiológicos y conductuales. Asimismo, esta escala no logra discriminar adecuadamente entre síntomas de ansiedad y de depresión.

Por lo antes expuesto se concluye acerca de la inexistencia de un instrumento que brinde una medición multidimensional de la ansiedad -dimensiones fisiológica, cognitiva, conductual y afectiva-, actualizada de acuerdo a los últimos estándares diagnósticos, y que a la vez considere diversas poblaciones objetivo en cuanto a su formato y extensión. La construcción de un instrumento que tome en cuenta estas limitaciones y las supere respondería así a una vacante en la medición psicológica tanto para el ámbito de investigación como para el de aplicación.

Un instrumento para evaluar la ansiedad que resulte apropiado en términos de una operacionalización completa y actualizada del constructo resultaría beneficioso para los actores del ámbito clínico en el proceso diagnóstico y terapéutico de los pacientes. La evaluación y formulación del caso son pilares que guían al terapeuta en la conducción de tratamientos eficaces (Clark & Beck, 2012; Keegan & Holas, 2010). La evaluación a través de una medida multidimensional de ansiedad proveería al terapeuta, con un considerable ahorro de tiempo, de la información detallada sobre las respuestas de ansiedad que son propias del paciente. Dicha información permitiría seleccionar las técnicas más efectivas para reducir la ansiedad de una forma individualizada de acuerdo al perfil de respuesta del paciente (Martínez Sánchez, et al., 1995; Miguel Tobal & Cano Vindel, 1986). De esta forma se emplearía un tipo de intervención ante la predominancia de síntomas cognitivos y afectivos, y otras distintas, de predominar los síntomas fisiológicos o conductuales. Adicionalmente, tal herramienta sería de gran utilidad para el ámbito de investigación, si se considera especialmente las dificultades con las que cuentan los instrumentos vigentes para lograr una medida que no se trasponga con los síntomas depresivos (Cano Vindel & Tobal, 1990; Martínez Sánchez et al., 1995; Sanz, 2014). Sumado a ello, la novedad del DSM-5 conlleva una desactualización en cuanto a los criterios diagnósticos vigentes por lo que la investigación que los incluya resulta escasa –sino nula- debido a la ausencia de herramientas que los operacionalicen.

Es por ello que el objetivo del presente trabajo radicó en el diseño y estudio psicométrico de una nueva herramienta psicométrica denominada Escala Multidimensional de la Ansiedad que intenta dar respuesta a los mencionados criterios necesarios para un instrumento que operacionaliza el constructo de ansiedad.

Método

Participantes

Juicio experto

La muestra de jueces expertos se constituyó por tres doctores en psicología docentes de la Universidad de Buenos Aires. Dos de ellos expertos en psicología clínica con orientación cognitiva conductual y experiencia en la evaluación y tratamiento de pacientes con trastornos de ansiedad, y una experta en psicometría con experiencia en la construcción de tests.

Prueba piloto

La muestra para la prueba piloto quedó constituida por un total de 30 sujetos, 16 varones y 14 mujeres, de los cuales 25 eran pacientes clínicos en tratamiento psicológico y 5 pertenecían a población general. La edad osciló entre 19 y 61 (M = 37.33; DE = 10.53). Las medias para la submuestra clínica y de población general fueron de 34.56 (DE = 9.14) y 46.20 (DE = 10.57) respectivamente. La escolaridad osciló entre 7 y 16 años de estudio (M = 13.67; DE = 3.08) y las medias obtenidas en ambas submuestras fueron de 14.44 (DE = 1.93) y 9.80 (DE = 2.95) respectivamente. Todos los participantes residían en la Provincia de Buenos Aires, 25 en Capital Federal y los 5 restantes en el Gran Buenos Aires. La submuestra de población general era exclusivamente de Capital Federal.

Materiales

Escala Multidimensional de Ansiedad (EMA). Esta escala se desarrolló como objetivo del estudio por lo que los detalles sobre su formato se describirán en los apartados subsiguientes. El instrumento integra los criterios diagnósticos para el trastorno de ansiedad según el DSM-5 (American Psychiatric Association, 2013) y la teoría cognitiva de la ansiedad (Clark & Beck, 2012). Se enmarca dentro del modelo cognitivo cuya premisa básica es que la ansiedad es un trastorno emocional multifacético que conlleva elementos diversos del dominio fisiológico, cognitivo, conductual y afectivo (Beck, 2002; Beck Brown, Steer, Eidelson & Riskind, 1987).

Planillas para la evaluación del test. Se utilizaron dos planillas diferentes, una para el juicio experto y otra para la prueba piloto. En ellas se les solicitó a los participantes que valoraran las características del test en cuanto a su calidad formal, claridad de la consigna, de los ítems, de la escala de medición y facilidad para registrar las respuestas.

Ficha de registro de datos sociodemográficos. Mediante la misma se recabó información sociodemográfica básica de los participantes de la prueba piloto.

Procedimiento

Se respetaron las sugerencias metodológicas de Hogan (2004) para la construcción de pruebas y los lineamientos de la Comisión Internacional de Test (ITC). Con el fin de garantizar la calidad del instrumento, el proceso de diseño se llevó a cabo mediante la siguiente secuencia de actividades propuestas por Tornimbeni, Pérez y Olaz (2008):

1. Revisión bibliográfica: Se realizó un análisis de las diversas teorías e investigaciones que han contribuido a la conceptualización del concepto ansiedad desde su incorporación en la psicología.

2. Definición y operacionalización del constructo: Se adoptó el enfoque más actualizado de la ansiedad, que la define como un constructo complejo y multidimensional conformado por cuatro dimensiones: fisiológica, cognitiva, conductual y afectiva. Se seleccionaron y operacionalizaron la sintomatología general asociada a los trastornos de ansiedad, de acuerdo con la teoría cognitiva de la ansiedad (Clark & Beck, 2012) y a los criterios diagnósticos del DSM-5 (American Psychiatric Association, 2013).

3. Revisión instrumental: Se relevaron y evaluaron los contenidos de los instrumentos auto-administrados de mayor difusión para la evaluación general de los síntomas clínicos de ansiedad. Para este análisis se tomaron los síntomas identificados en el análisis anterior y se los apareó con aquellos reactivos encontrados en el análisis instrumental. Por otro lado, se analizó la cobertura del constructo evaluado –tomando como criterio los síntomas identificados- por parte de los instrumentos de mayor difusión para la evaluación general de la ansiedad. Se revisaron 10 escalas construidas específicamente para tal fin, 3 escalas de ansiedad pertenecientes a inventarios de personalidad y 1 perteneciente a inventarios de síntomas. Los instrumentos analizados fueron: el Inventario de Situaciones y Respuestas de Ansiedad (ISRA; Miguel Tobal & Cano Vindel, 1986), El Cuestionario Multifacético de Personalidad de Minnesota-2 (MMPI-2; Butcher, Graham, Tellegen, & Kaemmer, 1989; Casullo, 1999), la escala R del Inventario de Ansiedad Estado Rasgo (STAI-R; Leibovich de Figueroa, 1991; Spielberger et al., 1983), El Inventario Revisado de Personalidad NEO (NEOPI-R; Costa, & McCrae, 1992; Richaud, et al., 2001), El Listado Revisado de 90 Síntomas SCL-90-R (Casullo, 2004; Derogatis, 2002), El Inventario de Ansiedad de Beck (BAI; Beck, Brown, Epstein, & Steer, 1988), La Escala de Ansiedad de Zung (EAZ; Zung, 1971), La Escala de Ansiedad de Hamilton Heteroaplicada (HAMA; Hamilton, 1959), La Escala de Ansiedad y Depresión Hospitalaria (HADS; Zigmond, 1983), La Escala de Ansiedad Clínica (CAS; Snaith, Baugh, Clayden, Husain, & Sipple, 1982), La Escala Breve de Ansiedad de Tyrer (BSA; Tyrer, 1984), El Cuestionario de Detección de Ansiedad (ASQ 15; Wittchen & Boyer, 1998).

4. Redacción de los ítems: Se redactaron los enunciados de acuerdo a un criterio mixto considerando la revisión bibliográfica e instrumental. Se tomaron en cuenta las postulaciones teóricas de la teoría cognitiva de la ansiedad (Clark & Beck, 2012), los criterios establecidos por el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5; American Psychiatric Association, 2013) y los reactivos surgidos del análisis instrumental. Para cada síntoma se propusieron varias alternativas que pretendían valorarlo de forma directa e inversa.

5. Juicio experto: La primera versión del instrumento fue sometida a un juicio experto. Se les solicitó a los jueces que evaluaran la consigna, la escala de medición y los enunciados, tanto desde el punto de vista lingüístico, conceptual y formal. Además, se les pidió que indicaran a cuál de las cuatro dimensiones de ansiedad consideraban que pertenecía cada ítem. Para ello se les facilitó una planilla con una breve descripción del constructo, la descripción de sus dimensiones y varias consignas a responder. Mediante ello se pretendió obtener evidencias de validez de contenido.

6. Prueba piloto: Se realizó una prueba piloto para identificar enunciados débiles o defectuosos y obtener evidencias de validez aparente. Para ello se proporcionó una planilla con la escala y varias consignas a responder. Los sujetos debían valorar la claridad de la consigna, la escala de medición y los 150 enunciados; y, de no comprenderse, proponer alternativas más adecuadas.

Resultados

A partir de la operacionalización del constructo se delimitaron 40 síntomas de ansiedad que integraban ambos criterios (ver tabla 1).

Tabla 1.

Operacionalización multidimensional del constructo ansiedad

Síntomas comunes
de ansiedad

(Beck, 2012)

Criterios DSM-5

Fisiológico

1

Aumento del ritmo cardiaco, palpitaciones

Palpitaciones

2

Dolor u opresión en el pecho

Dolor o molestias en el tórax

3

Respiración entrecortada, acelerada, Sensación de asfixia

Sensación de dificultades para respirar o asfixia

4

Sudores

Sudoración

5

Sofocos, escalofríos

Escalofríos o sensación de calor

6

Náuseas, dolor de estómago, diarrea

Náuseas o malestar abdominal

7

Temblores, estremecimientos

Temblor

8

Adormecimiento, temblor de brazos o piernas

Parestesias

9

Debilidad, mareos, inestabilidad Desmayo

Mareo, inestabilidad o desmayo

10

Músculos tensos, rigidez

Tensión muscular

11

Sequedad de boca/Sensación de ahogo/ de atragantarse

Sensación de ahogo

12

Problemas de sueño

Problemas de sueño

13

Rubores

Rubor

14

-----

Facilidad para fatigarse

Cognitivo

15

Miedo a perder el control

Miedo a perder el control

16

Miedo al daño físico o a la muerte

Miedo a morir

17

Miedo a enloquecer

Miedo a volverse loco

18

Miedo a la evaluación negativa de los demás

Miedo a la valoración negativa

19

Pensamiento, imágenes o recuerdos atemorizantes

Pensamientos de peligro

20

Percepciones de irrealidad o separación

Desrealización, despersonalización

21

Escasa concentración, confusión, distracción

Dificultad para concentrarse

22

Estrechamiento de la atención, hipervigilancia hacia la amenaza

Hipervigilancia

23

Poca memoria

-----

24

Dificultad de razonamiento, pérdida de objetividad

-----

25

Preocupación excesiva. Dificultad para controlar la preocupación.

Preocupación

26

Sobrestimación amenaza/Pensamientos automáticos negativos sobre lo que va a suceder

Sobreestimación del peligro/Ansiedad anticipatoria

27

Pensamientos automáticos negativos sobre si/ vulnerabilidad

-----

Conductual

28

Evitación de las señales o situaciones de amenaza, peligro.

Comportamientos cautelosos o evitativos.

29

Huida, alejamiento

Conductas de huida

30

Obtención/búsqueda de seguridad, reafirmación

Requieren la presencia de acompañante

31

Inquietud, agitación, marcha

Inquietud

32

Quedarse helado, paralizado

Paralizarse

33

Dificultades para hablar

-----

34

-----

Cambio significativo de mala adaptación del comportamiento

Afectivo

35

Nervioso, tenso, embarullado

-----

36

Agitación, sentimiento de estar al límite

Sensación de estar con los nervios de punta

37

Asustado, temeroso, aterrorizado

Miedo

38

Impaciente

-----

39

Irritabilidad

-----

40

Indecisión

-----

La revisión instrumental permitió recabar una base de enunciados indicativos de síntomas clínicos de ansiedad (ver tabla 2).

Tabla 2.

Revisión instrumental de instrumentos que evalúan ansiedad

Síntomas comunes de la ansiedad (Beck, 2012)

Criterios dsm-5

Ítems escalas adaptados localmente

Items escalas generales de ansiedad

Fisiológico

1

Aumento del ritmo cardiaco, palpitaciones

Palpitaciones

MMPI-208, SCL-39, ISRA-F6

BAI-7, EAZ-10, HAMA-9, HAMA - 14, CAS-3, BSA- 7, ASQ-13

2

Dolor u opresión en el pecho

Dolor o molestias en el tórax

MMPI-47

HAMA-9, HAMA-10

3

Respiración entrecortada, acelerada, Sensación de asfixia

Sensación de dificultades para respirar o asfixia

ISRA-F7, MMPI-208

BAI-15, EAZ-13, HAMA-10, HAMA-14, BSA-7, ASQ-13, BAI-11, HAMA-10

4

Sudores

Sudoración

MMPI-178, MMPI-238, ISRA-F2

BAI-21, HAMA-13, CAS-3, BSA-7, BSA-9, ASQ-13, EAZ-17

5

Sofocos, escalofríos

Escalofríos o sensación de calor

ISRA-F10

BAI-2, HAMA-8

6

Náuseas, dolor de estómago, diarrea

Náuseas o malestar abdominal

MMPI-18, MMPI-28, ISRA-F1, ISRA-F8

EAZ-15, HAMA- 11, BAI-18, EAZ-15, HAMA-11

7

Temblores, estremecimientos

Temblor

MMPI-91, SCL-17

BAI-12, BAI-13, EAZ-6, HAMA-2, HAMA-14, ASQ-13, HAMA-7

8

Adormecimiento, temblor de brazos o piernas

Parestesias

MMPI-53, ISRA-F3

BAI-1, EAZ-14, HAMA-8

9

Debilidad, mareos, inestabilidad Desmayo

Mareo, inestabilidad o desmayo

MMPI-164

10

Músculos tensos, rigidez

Tensión muscular

ISRA-F5

Fisiológico

11

Sequedad de boca/ Sensación de ahogo/ de atragantarse

Sensación de ahogo

ISRA-F9; MMPI-11, MMPI-404

HAMA-11, HAMA- 13, BSA- 7, BSA-9

12

Problemas de sueño

Problemas de sueño

MMPI-3, MMPI-5, MMPI-30, MMPI-39, MMPI-140

EAZ-19, HAMA-4, BSA-6, ASQ-13

13

Rubores

Rubor

----

BAI-20, EAZ-18, HAMA-13, BSA-9

14

----

Facilidad para fatigarse

(MMPI-330)

EAZ-8, HAMA-2, ASQ-2, ASQ-13, STAI-8, STAI-22, STAI-26

Cognitivo

15

Miedo a perder el control

Miedo a perder el control

----

BAI-14, CAS -7, CAS-2

16

Miedo al daño físico o a la muerte

Miedo a morir

----

BAI-16

17

Miedo a enloquecer

Miedo a volverse loco

MMPI-170

----

18

Miedo a la evaluación negativa de los demás

Miedo a la valoración negativa

ISRA-C7

----

19

Pensamiento, imágenes o recuerdos atemorizantes

Pensamientos de peligro

SCL-86, STAI-31, NEOPIR-211

----

20

Percepciones de irrealidad o separación.

Desrealización, despersonalización

MMPI-311

----

21

Escasa concentración, confusión, distracción

Dificultad para concentrarse

MMPI-31, MMPI-299, MMPI-325, ISRA-C6

HAMA-5, ASQ- 13

22

Estrechamiento de la atención, hipervigilancia hacia la amenaza

Hipervigilancia

SCL-23

CAS-3

23

Poca memoria

----

MMPI-165

HAMA-5

24

Dificultad de razonamiento, perdida de objetividad

Cognitivo

25

Preocupación excesiva.

Dificultad para controlar la preocupación.

Preocupación

MMPI-196, MMPI-305, MMPI-408, MMPI-442, STAI-7, STAI-17, STAI-37, STAI-28, STAI-29, NEOPIR-1, ISRA-C1

ASQ -12, CAS-4, HAMA-1, HADS-5, BSA-4, ASQ-7, ASQ-10, ASQ-11, ASQ- 12, ASQ-14

26

Sobrestimación amenaza/

Pensamientos automáticos negativos sobre lo que va a suceder

Sobreestimación del peligro/

Ansiedad anticipatoria

MMPI-415, SCL-80, NEOPIR-121, NEOPIR-151, MMPI-463

BAI-5, HAMA-1, EAZ-5, HADS-3, CAS-5, GAD7- 7, STAI-7, EEA-90, BAI-5, HAMA-1, EAZ-5, HADS-3, CAS-5, BSA- 5

27

Pensamientos automáticos negativos sobre si/ vulnerabilidad

STAI-2, STAI-33, STAI-11, STAI-23, STAI-25, STAI-32, ISRA-C2, ISRA-C3,

----

Conductual

28

Evitación de las señales o situaciones de amenaza, peligro.

Comportamientos cautelosos o evitativos

SCL-50, ISRA-M4

----

29

Huida, alejamiento

Conductas de huida

MMPI-339

----

30

Obtención/búsqueda de seguridad, reafirmación

Requieren la presencia de acompañante

----

----

31

Inquietud, agitación, marcha

Inquietud

MMPI-242, ISRA-M5, SCL-78, STAI-10, STAI-16, STAI-27, NEOPIR-91, ISRA-M2

HAMA-1, BSA-1, ASQ-13, HAMA - 2, HAMA- 14, HADS -11, CAS-3, CAS-6, EAZ-9, HADS-7, ASQ- 3, ASQ-13.

32

Quedarse helado, paralizado

Paralizarse

ISRA-M6

----

33

Dificultades para hablar

ISRA-M7

HAMA-7

34

----

Cambio significativo de mala adaptación del comportamiento

----

----

Afectivo

35

Nervioso, tenso, embarullado

----

MMPI-15, MMPI-223, MMPI-273, MMPI-444, MMPI-469, MMPI-496, MMPI-509, STAI-40, SCL-2, STAI-3, STAI-12, STAI-18, NEOPIR-91

HAMA-2, HAMA-14, HADS-1, CAS-1, BSA-1, ASQ-7, ASQ-13, BAI-10, EAZ-1, HADS-1, CAS-1, ASQ-3, ASQ-13, BAI-4, HAMA -2, HADS -7, BSA -1

36

Agitación, sentimiento de estar al límite

Sensación de estar con los nervios de punta

MMPI-405, SCL-57, STAI-1, STAI-6, STAI-13, STAI-15, STAI-19, STAI-27

CAS-1

37

Asustado, temeroso, aterrorizado

Miedo

SCL-33, SCL-72, STAI-2, STAI- 33, STAI-9, NEOPIR-31, NEOPIR-121, NEOPIR-181, ISRA-C5

BAI- 17, CAS-3, HADS-3, ASQ- 4, ASQ-13, BAI-9, CAS-7, BSA-1, HADS-13, EAZ-2

38

Impaciente

----

----

39

Irritabilidad

----

----

HAMA-1, ASQ-13

Malestar

MMPI-23, MMPI-244, MMPI-252, STAI-4, ISRA-M1

CAS-1, CAS-7, BSA-1, STAI-9, ASQ-2

40

Indecisión

----

STAI-14, STAI- 25, STAI-34, ISRA-C4

Nota. ISRA (Inventario de Situaciones y Respuestas de Ansiedad; Miguel Tobal & Cano Vindel, 1986, 2002), MMPI-2 (Cuestionario Multifacético de Personalidad de Minnesota-2; Casullo, 1999), STAI (escala R del Inventario de Ansiedad Estado Rasgo; Leibovich de Figueroa, 1991; Spielberger et al., 1983 ), NEOPI-R (Inventario Revisado de Personalidad NEO; Costa, & McCrae, 1992; Richaud, et al., 2001), SCL-90-R (Listado Revisado de 90 Síntomas; Casullo, 2004; Derogatis, 2002), BAI (Inventario de Ansiedad de Beck; Beck, Brown, Epstein, & Steer, 1988), EAZ (Escala de Ansiedad de Zung; Zung 1971), HAMA (Escala de Ansiedad de Hamilton Heteroaplicada; Hamilton, 1959), HADS (Escala de Ansiedad y Depresión Hospitalaria; Zigmond, 1983), CAS (Escala de Ansiedad Clínica; Snaith, Baugh, Clayden, Husain, & Sipple, 1982), BSA (Escala Breve de ansiedad de Tyrer; Tyrer, 1984), ASQ-15 (Cuestionario de Detección de Ansiedad; Wittchen & Boyer, 1998).

Al analizarse la cobertura del constructo evaluado por parte de los instrumentos de mayor difusión para la evaluación general de la ansiedad, se detectaron síntomas y dominios no evaluados por estos (ver tabla 3), por lo que resultaron todos ellos insuficientes para valorar la complejidad del constructo bajo dicho modelo teórico.

Tabla 3.

Análisis del contenido de los instrumentos bajo los síntomas multidimensionales de ansiedad.

Instrumentos adaptados localmente

Instrumentos sin adaptación local

STAI

ISRA

MMPI-2

NEOPI-R

SCL-90

BAI

EAZ

HADS

HAMA

BSA

ASQ

CAS

Síntomas fisiológicos

1

Palpitaciones

X

x

x

x

x

X

x

x

x

2

Dolor u opresión en el pecho

x

X

3

Hiperventilación, sensación de asfixia

x

x

x

x

X

x

x

4

Sudoración

x

x

x

x

X

x

x

x

5

Escalofríos o sofocos

x

x

X

6

Náuseas o malestar abdominal

x

x

x

x

X

7

Temblores

x

x

x

x

X

x

8

Parestesias

x

x

x

x

X

9

Mareo, inestabilidad o desmayo

x

x

x

X

x

x

10

Tensión muscular

x

X

x

x

x

11

Sequedad boca, atragantamiento

x

x

X

x

12

Problemas de sueño

x

x

X

x

x

13

Rubor

x

x

X

x

14

Facilidad para fatigarse

x

x

x

X

x

Síntomas cognitivos

15

Miedo a perder el control

x

x

16

Miedo al daño físico o la muerte

x

17

Miedo a volverse loco

x

18

Miedo a la valuación negativa de los demás

x

19

Pensamientos, imágenes o recuerdos atemorizantes

x

x

x

20

Desrealización, despersonalización

x

21

Dificultad para concentrarse

x

x

X

x

22

Hipervigilancia

x

x

23

Poca memoria

x

X

24

Dificultad para razonar

25

Preocupación

x

x

x

x

x

x

x

x

26

Sobrestimación peligro

x

x

x

x

x

x

X

x

x

27

Sensación de vulnerabilidad

x

x

Síntomas conductuales

28

Comportamientos cautelosos o evitativos

x

x

29

Conducta de huida

x

30

Búsqueda acompañante

31

Inquietud

x

x

x

x

x

x

X

x

x

x

32

Paralización

x

33

Dificultades para hablar

x

X

34

Comportamiento maladaptativo

Síntomas afectivos

35

Nervioso, tenso, embarullado

x

x

x

x

x

X

x

x

x

36

Agitación, sentimiento de estar al limite

x

x

x

x

37

Asustado, temeroso

x

x

x

x

x

x

x

x

x

38

Impaciente

39

Irritable

X

x

40

Indeciso

x

x

Debido a que uno de los objetivos principales radicaba en que el instrumento abarcara las cuatro dimensiones propuestas por Clark y Beck (2012) se redactaron ítems para aquellos dominios no evaluados por las escalas analizadas. El pool inicial quedó constituido por 150 ítems.

Para la respuesta a los ítems, se seleccionó un formato de respuesta Likert de frecuencia de cinco posiciones: 0 (no me pasó nunca), 1 (no me paso casi nunca), 2 (me paso algunas veces), 3 (me pasa casi siempre) y 4 (me pasa siempre).

El grupo de expertos no realizó correcciones sobre la redacción de la consigna ni sobre las opciones de respuesta. El índice de acuerdo entre jueces indicó que en 106 ítems el grado de acuerdo entre los jueces sobre la pertenencia del reactivo a la dimensión era total. Los 44 restantes poseían algún nivel de desacuerdo entre los jueces: 18 de estos tenían un acuerdo inferior al .50, y los 26 restantes con un acuerdo algo superior al .60. A partir del juicio experto, se realizaron modificaciones en la redacción de 37 ítems, de forma tal que representaran de forma más clara y precisa al dominio que pretendía medir (ver tabla 4).

Tabla 4.

Correcciones a partir de juicio experto

Ítems originales

Ítems corregidos

Estar inquieto y no poder quedarme en un solo lugar.

Estar inquieto

Considerar que soy una persona temerosa.

Ser una persona temerosa

Cuando pienso en el futuro, sentir lo que ocurra nunca será demasiado terrible.

Pensar que lo que ocurra en el futuro nunca será demasiado terrible.

Evitar los conflictos porque pienso que no puedo resolverlos.

Evitar los conflictos porque no puedo resolverlos.

Estar con un nudo en la garganta, como atragantado.

Estar con un nudo en la garganta.

Incluso en días fríos, sudar las manos u otras partes del cuerpo. Incluso en días fríos, tender a sudar mucho.

Incluso en días fríos que me suden las manos u otras partes del cuerpo.

Tratar de hacer algo para que no se note que estoy nervioso.

Hacer algo para que no se note que estoy nervioso.

Tender a alejarme de aquello que me produce miedo o ansiedad.

Alejarme de aquello que me produce miedo o ansiedad

Incluso si no hay peligro, estar en estado de alerta, a la guardia.

Estar alerta aun si no hay peligro.

Ser una persona que vive tensionada la mayor parte del tiempo.

Vivir tensionado

Sentir hormigueo, picazón o bien de que algunas partes del cuerpo se quedan dormidas.

Sentir hormigueo, picazón o que algunas partes del cuerpo se quedan dormidas.

Tener la sensación de estar atrapado.

Sentirme atrapado, entre la espada y la pared.

Incluso cuando sé que no tienen importancia, no poder dejar de preocuparme por las cosas.

No poder dejar de preocuparme por cosas que sé que no tienen importancia.

Estar en estado de alerta, atento a cualquier peligro o amenaza.

Estar atento a cualquier peligro o amenaza.

Sentir que tengo la energía suficiente para hacer mis actividades diarias.

Tener energía suficiente para hacer mis actividades diarias.

Cuando pienso en mi futuro, sentir que voy a poder manejar cualquier cosa que suceda.

Creer que voy a poder manejar cualquier cosa que suceda en el futuro.

Sentir que me pongo colorado fácilmente.

Ponerme colorado fácilmente.

Tener dificultades para dejar de a un lado las preocupaciones.

Tener dificultades para dejar a un lado las preocupaciones

Incluso si algo me da miedo o ansiedad enfrentarlo.

Enfrentar situaciones, aunque me den miedo o ansiedad

Dejar de hacer actividades o frecuentar lugares porque me producen ansiedad.

Dejar de hacer actividades o frecuentar lugares porque me producen malestar o ansiedad.

Estar plenamente consciente y con los pies en la tierra.

Estar plenamente consciente.

Poder concentrarme en una tarea o trabajo sin que nada me distraiga.

Concentrarme en una tarea o trabajo sin que nada me distraiga.

Al estar nervioso, sentir la voz poco firme, tartamudear o no poder expresarme bien.

Tener la voz poco firme, tartamudear o no poder expresarme bien.

Si algo me sale mal dejarlo abandonado.

Abandonar actividades que me salen mal.

Sentirme expuesto a peligros frente a los cuales no tengo control.

Creer que estoy expuesto a peligros frente a los cuales no tengo control.

Necesitar compañía para sentirme seguro y tranquilo.

Buscar compañía para sentirme seguro y tranquilo.

Cuando las cosas se complican o no resultan como esperaba terminar abandonándolas.

Abandonar actividades que se complican o no resultan como esperaba.

Tener miedo a salir lastimado.

Tener miedo a salir lastimado física o psicológicamente.

Sentir aturdimiento o confusión.

Sentirme aturdido o confundido.

Tener mucha paciencia.

Ser paciente

Necesitar mover alguna parte de mi cuerpo o caminar casi constantemente.

Mover alguna parte de mi cuerpo o caminar casi constantemente.

Considerar que tengo menos temores que la mayoría de la gente.

Considerarme con menos temores que la mayoría de la gente.

Sentir cansancio con mucha facilidad.

Cansarme con mucha facilidad.

Al estar ansioso o asustado quedar paralizado.

Paralizarme cuando estoy muy ansioso o asustado.

Sentir dolor o presión en el pecho.

Sentir dolor u opresión en el pecho.

Poder relajarme cuando quiero.

Relajarme cuando quiero

Cuando tengo miedo o ansiedad sentir ganas de salir corriendo.

Cuando tengo miedo o ansiedad tener ganas de salir corriendo

Tanto la escala de medición como la consigna debieron ser modificadas de acuerdo con los comentarios recabados en la prueba piloto. El 30% de la muestra piloto no comprendió la escala Likert, ya sea por el estilo de respuesta como por las categorías de frecuencia que la componían. Por ello se modificaron las opciones de respuesta intentado simplificarlas. La modificación resultó en las siguientes opciones de respuesta: Nunca, Pocas veces, Varias veces, Casi siempre, Siempre.

De la prueba piloto también se consideraron las dificultades para comprender el contenido de los ítems. De acuerdo a ello se modificaron 55 ítems, de forma tal de simplificar la redacción de los mismos y eliminar de estos la mención de frecuencia o intensidad sintomática (ver tabla 7).

Tabla 7.

Corrección a partir de prueba piloto

Ítems originales

Ítems corregidos

Ser una persona tranquila, calma.

Ser una persona tranquila

Estar irritable y enojarme fácilmente

Estar irritable

Incluso en días fríos que me suden las manos u otras partes del cuerpo.

Sudar las manos u otras partes del cuerpo, incluso en días fríos

Tener miedo de morir.

Tener miedo a morir.

Hacer algo para que no se note que estoy nervioso.

Hacer algo para disimular que estoy nervioso.

Tener miedo de recibir una muy mala noticia.

Tener miedo a recibir una mala noticia.

Estar disgustado.

Sentirme disgustado.

Tener miedo de perder el control.

Tener miedo a perder el control.

Estar angustiado y llorar con facilidad.

Estar angustiado.

Tener el sueño muy liviano, irregular o inquieto.

Tener problemas para dormir (sueño liviano, horarios irregulares para acostarse o despertarse, dificultades para conciliar el sueño, moverse mucho al dormir).

Estar inquieto, moverme y hacer cosas sin una finalidad concreta.

Moverme y hacer cosas sin una finalidad concreta.

Sentir que las preocupaciones interfieren en mi vida.

Sentir que las preocupaciones agobian mi vida.

Sentir debilidad en las piernas.

Sentir debilidad en las piernas y/o brazos.

Sentirme atrapado, entre la espada y la pared.

Sentirme atrapado, en una situación sin salida.

No poder dejar de preocuparme por cosas que sé que no tienen importancia.

Preocuparme por cosas que sé que no tienen importancia.

Estar atento a cualquier peligro o amenaza.

Estar alerta, en búsqueda de cualquier signo de peligro o amenaza.

Sentirme alterado, agitado.

Sentirme excitado, agitado.

Estar muy pendiente a las críticas.

Estar pendiente a las críticas de los demás.

Sentir el cuerpo rígido, en tensión.

Sentir el cuerpo rígido o tensionado

Sentir un nudo en la garganta.

Sentir un nudo en la garganta o la sensación de estar atragantado.

Sentir como si fuera a pasar algo espantoso.

Tener la impresión de que va a pasar algo malo.

Sentir debilidad muscular especialmente en las piernas.

Sentir debilidad en las piernas y/o brazos

Tener sofocaciones de calor o escalofríos.

Tener sofocaciones o escalofríos.

Tener miedo de volverme loco.

Tener miedo a volverme loco.

Incluso si estoy haciendo algo que disfruto, no poder dejar de pensar en lo que me preocupa.

No poder dejar de pensar en lo que me preocupa, incluso si estoy haciendo algo que disfruto.

Sentirme mareado.

Sentir inestabilidad, mareos o incluso desmayarme.

Verme limitado en mi vida diaria debido a mi ansiedad o miedo.

Sentirme limitado en mis actividades diarias debido al miedo o ansiedad.

Tratar de que alguien me acompañe para evitar sentirme mal.

Pedir que alguien me acompañe para evitar sentirme mal.

Asustarme con facilidad y sin motivo.

Asustarme con facilidad.

Evitar acercarme a algunos lugares o hacer determinadas actividades porque me hacen sentir mal.

Evitar acercarme a algunos lugares o hacer determinadas actividades porque me dan miedo o me hacen sentir mal.

Tener malestar de estómago, acidez, náuseas o vómitos.

Tener malestar en el estómago, acidez, náuseas o vómitos.

Tener la voz poco firme, tartamudear o no poder expresarme bien.

Tener la voz poco firme, tartamudear o no poder hablar bien.

Creer que estoy expuesto a peligros frente a los cuales no tengo control.

Sentir que estoy frente a situaciones que no puedo controlar.

Sentir que mi cuerpo se estremece, tiembla.

Sentir temblores o estremecimientos en el cuerpo.

Ser una persona muy paciente.

Ser una persona paciente.

Sufrir de temblores en las manos y/o las piernas.

Tener de temblores en las manos y/o las piernas.

Sentir la boca seca.

Tener la boca seca.

Cuando siento ansiedad tratar de distraerme con algo, por ejemplo, diario, música, celular, etc.

Tratar de distraerme con algo, por ejemplo, diario, música, celular, etc., cuando siento malestar o ansiedad.

Estar preocupado por algo.

Estar constantemente preocupado por algo.

Tener dificultades para expresarme, tartamudear, hablar con la voz poco firme o insegura.

Tener dificultades para expresarme, tartamudear o hablar con la voz poco firme.

Gozar de buena memoria.

Tener buena memoria.

Sufrir de escalofríos o sofocones de calor.

Sufrir de escalofríos o sofocones.

Tener miedo de ser criticado.

Tener miedo a ser criticado.

Tratar de evitar situaciones de dificultad.

Intentar evitar situaciones de dificultad.

Sentir que me falta el aire y que me cuesta respirar bien.

Sentir que no puedo respirar bien y que me falta el aire.

Sentir que algo malo va a pasar.

Sentir que algo malo esta por pasar.

Temblar las manos y/o las piernas.

Sentir que las manos y/o piernas me tiemblan.

Cansarme con mucha facilidad.

Sentir que me canso con facilidad.

Pensar que las cosas van a salir mal.

Anticipar que las cosas van a salir mal.

Tener dificultades para tragar.

Sentir un nudo en la garganta o dificultades para tragar.

Para evitar enfrentarme a lo que me produce miedo o ansiedad, cambiar mi rutina y hábitos de conducta.

Cambiar mi rutina o conductas habituales para evitar enfrentarme a lo que me provoca miedo o ansiedad.

Tener sensación de hormigueo o adormecimiento en el cuerpo.

Sentir hormigueo o adormecimiento en el cuerpo.

Sufrir de puntadas en el pecho o en el corazón.

Sentir puntadas en el pecho o en el corazón.

Sentirme limitado a hacer lo que quiero por mis miedos.

Sentir que mis miedos limitan mis proyectos.

Notar que mi corazón late muy fuerte y rápido.

Sentir que el corazón late muy fuerte y rápido.

Comentarios

El objetivo de este estudio radicaba en generar un instrumento a partir de las conceptualizaciones más actualizadas de ansiedad y los últimos criterios diagnósticos para el trastorno de ansiedad. Con la construcción de dicha escala se pretende cubrir un vacío importante, ya que no existen instrumentos diseñados y validados para medir de forma breve y multidimensional los síntomas clínicos de ansiedad en población adulta, aportando así una herramienta valiosa para ser utilizada tanto en la clínica como en actividades de investigación.

De la revisión bibliográfica se concluyó que 40 síntomas abarcaban de manera integral tanto los postulados de la teoría cognitiva de la ansiedad (Clark & Beck, 2012) como los criterios establecidos por el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5; American Psychiatric Association, 2013).

La evaluación acerca de la cobertura de esos 40 síntomas por parte de los instrumentos vigentes para la evaluación de la ansiedad demostró la insuficiencia de los mismos en la operacionalización completa del constructo. Los instrumentos que valoran el menor número de síntomas son el NEOPI-R con tres de ellos, uno perteneciente a la dimensión cognitiva, otro de la dimensión conductual y el último de la dimensión afectiva; el STAI-R, con sólo cuatro de ellos, dos de la dimensión afectiva, uno a la dimensión cognitiva y otro a la conductual; y el HADS también cuatro de ellos, uno de la dimensión fisiológica, otro de la conductual y dos de la afectiva. Por su parte, dentro de los instrumentos que logran valorar un mayor número de síntomas son el ISRA, con catorce de ellos, el HAMA y el MMPI-2 con trece, pertenecientes a las cuatro dimensiones. Los síntomas no valorados por ninguno de los instrumentos antes citados pertenecen en su mayoría a la dimensión conductual, con excepción de impaciente/frustrado que pertenece a la afectiva. Los instrumentos analizados valoran casi con exclusividad los síntomas conductuales de inquietud y agitación, obviando otros de suma importancia para el modelo cognitivo de la ansiedad, como son: huida/ alejamiento, obtención/búsqueda de seguridad, intento de prevenir o controlar el peligro. Por su parte la evitación, síntoma esencial para dicho modelo porque funciona como mecanismo de mantenimiento de la ansiedad, es valorado sólo en dos instrumentos, el ISRA y el SCL-90-R, de los doce analizados.

Las modificaciones a los ítems recibidas mediante el juicio experto refirieron en su mayoría a aspectos formales y no conceptuales. Se sugirió la utilización de determinados verbos o vocablos en los enunciados para discriminar dimensionalmente los síntomas que se pretendían medir. Asimismo, otros ítems fueron modificados, simplificándose la redacción para lograr mayor ajuste dimensional y evitar confundir los procesos involucrados.

De la prueba piloto se pudo recabar información en relación con todos los apartados de la escala. La escala Likert no resultó ser adecuada debido a que tanto las categorías que componían la escala como el estilo de respuesta llevaban a confusiones. Por un lado, se evidenciaron dificultades para discriminar las categorías intermedias y, por otro, el estilo de respuesta propiciaba dudas temporales en relación con el período que debía considerarse para valorar la presencia de la sintomatología. Por ello se la modificó simplificando la escala de medición y agregando mayor información a la consigna. Por otro lado, la redacción de algunos ítems no lograba ser clara. Las modificaciones abarcaron aspectos tales como la simplificación de la redacción y la presentación más explícita de cómo se manifiestan algunos síntomas que varían de persona a persona.

La EMA quedó así conformada por 150 ítems indicativos de 40 síntomas clínicos de ansiedad que integran los criterios diagnósticos para el trastorno de ansiedad según el DSM-5 (American Psychiatric Association, 2013) y la teoría cognitiva de la ansiedad (Clark & Beck, 2012). Todos los análisis aquí realizados aportaron a las evidencias de validez de contenido y aparente de esta escala. Sin embargo, estos estudios son sólo el primer paso en su construcción. A posteriori, se deberá estudiar la dimensionalidad de la escala mediante estudios factoriales con muestras mayores que den cuenta de su validez de constructo. Además, deberán obtenerse evidencias de validez externa mediante el análisis comparativo con otras medidas y evidencias de validez por grupos contrastados que garanticen su uso para el diagnóstico de psicopatología ansiosa. Todo ello deberá ser acompañado del estudio de aspectos relacionados a la confiabilidad y finalmente la transferencia tanto del instrumento de medición como de sus correspondientes baremos para su uso por parte de la comunidad científica y el ámbito de aplicación.

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1 Universidad de Buenos Aires. Argentina. ilianadiazk@hotmail.com

2 Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Universidad de Palermo. Argentina.