El juego y el humor en la práctica docente
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https://doi.org/10.18682/add.vi8.2813
Résumé
Como en el diseño, no hay un solo final... Hay más finales para este principio
Estoy tentado a afirmar que todo ejercicio propuesto por un docente, es en sí mismo un juego, y por tanto siempre estamos de alguna manera jugando o haciendo jugar a nuestros estudiantes. Y, en términos esquemáticos o totalitarios, podríamos afirmar que sólo puede ser docente aquel que esté dispuesto a jugar.
Publiée
2020-10-28
Rubrique
Artículos